Un paciente debe esperar una media de 113 días para operarse en Cataluña. Y alguien que necesite una prueba diagnóstica deberá aguardar 45 días. Esto significa una ligera mejora respecto a la situación de junio de 2007, cuando los pacientes catalanes debían esperar 116 días para operarse y 49 para hacerse unas pruebas.
La consejera de Salud, Marina Geli, presentó ayer los datos de junio (los últimos de que dispone) y se mostró moderadamente satisfecha. Pero Cataluña sigue lejos de los 74 días en los que se sitúa la media de espera en España para operaciones, según datos del Ministerio de Sanidad.
Geli subrayó que el sistema sanitario catalán ha logrado seguir disminuyendo los tiempos de espera, pese a que los ciudadanos con tarjeta sanitaria han aumentado un 2,44% en un año, alcanzando las 7.503.118 personas.
Carme Sabaté, de la Coordinadora de Usuarios de la Sanidad, subraya que el tiempo de espera para operarse en la Cataluña central y en el área metropolitana de Barcelona, la más poblada, continúa por encima de los 120 días.
Sabaté afirma que a este tiempo hay que añadirle el que los pacientes han tardado en ser visitados por un especialista para calcular lo que realmente deben esperar para ser operados.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 28 de agosto de 2008