El PP de la Comunidad Valenciana hizo caso omiso ayer de sus nuevos estatutos, aprobados el pasado sábado, que fijan la suspensión de funciones y militancia a sus cargos públicos con una sentencia penal firme. Andrea Fabra, hija del presidente de la Diputación de Castellón, y Juan José Rubert, miembros de la dirección regional, ofrecieron una rueda de prensa con el ex alcalde de Vila-real Manuel Vilanova, presidente del PP local, condenado por el Supremo a prisión menor e inhabilitación por prevaricación.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 21 de octubre de 2008