Emir Suljagic y Arkadi Bábchenko / CARLES RIBAS
El soldado y el superviviente
Los dos son jóvenes, vitales y amables. No llaman la atención especialmente por ningún rasgo pero comparten algo estremecedor en el fondo de los ojos. Cuando uno se asoma a sus miradas, ahí está lo que los hace tan singulares, una sombra, un muro, una pena indefinible, un peso, una marca.