El presidente de Unió, Josep Antoni Duran Lleida, quiso tranquilizar ayer a sus socios de Convergència por la reunión prevista entre las cúpulas de UDC y PSC, asegurando que este diálogo no implica "renunciar" a sus planteamientos. En un apunte en su blog, el líder democristiano consideró algo "extraordinario" que la reunión entre dirigentes de Unió y la cúpula socialista para el 14 de noviembre se haya convertido en noticia.
"Sin prejuzgar ningún acuerdo (Unió sólo tiene acuerdos con CDC) sería normal que los partidos nos viésemos más a menudo. El diálogo es básico en política, y aquí lo practicamos poco y hay muchas cuestiones que necesitarían más diálogo y menos confrontación, especialmente cuando se atraviesan momentos difíciles para un país como Cataluña", remachó Duran.
Duran quería así quitar hierro a un encuentro que ha provocado malestar en las filas de Convergència, cuyos dirigentes exigirán a Unió, en la reunión que la dirección de CiU celebrará el lunes 10 de noviembre, que no se deje "utilizar" por el PSC para desgastar a Artur Mas y a la propia formación convergente, así como a la salud del pacto de federación.
El líder socialcristiano, que abogó claramente por un pacto de sociovergencia -entre PSC y CiU- en el futuro, apuntó: "Que nadie se preocupe, que dialogar no es renunciar. Sólo se puede dialogar cuando se tienen muy claros los principios", resaltó el presidente de la formación democristiana.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 28 de octubre de 2008