La secretaría permanente de la Unión por el Mediterráneo (UpM), que se ubicará en el Palau de Pedralbes, empezará a funcionar durante los primeros meses de 2009 -y obligatoriamente antes de mayo-, según figura en la declaración final de la cumbre de cancilleres celebrada el martes en Marsella, que designó a Barcelona como sede de este organismo.
El documento aprobado en la cumbre detalla las características, funciones, competencias y composición de esta secretaría, que tendrá únicamente carácter técnico -en ningún caso político- y que se encargará de la coordinación y búsqueda de financiación para los proyectos de inversión en el arco mediterráneo, en especial en la ribera sur. Los seis ámbitos de actuación de la secretaría serán: descontaminación del Mediterráneo, autopistas marítimas y terrestres, programas de protección civil para la prevención de catástrofes, energías renovables, Universidad, desarrollo de empresas y un Plan Erasmus para estudiantes.
La oficina se compondrá de un secretario general, previsiblemente tunecino, y cinco secretarios generales adjuntos procedentes de Grecia, Israel, Italia, Malta y la Autoridad Palestina, cuyo mandato será de tres años prorrogables a otros tres. La secretaria se completará con un número de funcionarios que, en principio, no será superior a 70, aportados por los países miembros y siguiendo criterios de "equilibrio geográfico".
El primer paso para la puesta en marcha de la oficina será la redacción del estatuto de la secretaría -a cargo de un grupo de altos funcionarios de la UpM-, cuyo contenido deberá adaptarse al régimen jurídico español y al comunitario. El documento tendrá que estar aprobado a finales de febrero de 2009. Posteriormente, la UpM y el Gobierno español deberán firmar otro estatuto que deberá garantizar a la secretaría permanente "plena autonomía, personalidad jurídica para el ejercicio de sus funciones y los privilegios e inmunidad de los secretarios y del personal internacional". Estos estatutos entrarán en vigor antes de la puesta en marcha de la oficina.
Con anterioridad, el Gobierno español, la Generalitat y el Ayuntamiento crearán un grupo de trabajo para coordinar los trabajos de adecuación del Palau de Pedralbes y el funcionamiento de la secretaría.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 6 de noviembre de 2008