El Celta surtió efectos tonificantes en el Espanyol que logró su primera goleada durante el presente ejercicio. Lo necesitaba el equipo de Márquez, el tercero menos realizador en la Liga. El partido reconfortó a la escasa parroquia que se dio cita en Montjuïc y sirvió para que se reivindicaran jugadores habitualmente alejados del centro de los focos. Sin sus tenores, Tamudo, Luis García y De la Peña, Jarque, Valdo y Nené, que ya brilló en el empate a dos en Balaídos, aprovecharon para reclamar su cuota de protagonismo. Marcaron Jarque, Valdo y Noguerol en propia puerta.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 13 de noviembre de 2008