La propuesta de la Comisión Nacional de la Energía de subir la luz un 31% no sólo es una barbaridad, sino que es de juzgado de guardia, de ministerio fiscal. Lo que tiene que hacer la CNE es explicar a los ciudadanos el origen del déficit de más de 14.000 millones de euros que quieren que paguemos todos. Y el Gobierno socialista debe explicar si quiere o si no teme investigar las subvenciones que se han concedido al sector, el enorme coste de la energía eólica y solar, y los negocios que se están haciendo en estos campos, así como los movimientos de diversos grupos económicos en las eléctricas.
Con los beneficios que han tenido y están teniendo estas empresas (no está muy lejano el ejemplo del señor Pizarro y algún otro), estaría bueno que los españolitos cargáramos con este supuesto déficit.
Si tan grande es el agujero, a lo mejor debería el Estado pensar en nacionalizaciones, no vaya a ser que algún día o alguna noche de éstas nos apaguen la luz por falta de recursos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 14 de noviembre de 2008