La televisión recoge la confusión a las puertas del hotel Oberoi de Bombay, donde los botones evacuan a los heridos después del tiroteo y la explosión. La presidenta, que está registrándose en el hotel tras visitar una cooperativa de mujeres, se refugia bajo el mostrador de la recepción y luego sale a gatas hacia la cocina.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 27 de noviembre de 2008