Los partidos que sustentan el Gobierno autónomo, PNV, EA y la EB de Madrazo -yo creía que el Movimiento Comunista era internacionalista, no hipernacionalista-, acaban de negarse en el Parlamento de Vitoria a que la Vuelta Ciclista a España incluya a alguna población del País Vasco como llegada o salida de alguna de sus etapas. "Euskadi no es España", ha dicho como justificación la representante de Eusko Alkartasuna, Idoia Cuadra.
Creo en la libertad de las personas para sentirse de donde les parezca más oportuno: vascas, españolas, fifty-fifty o cuarto y mitad; o sea, como si la señora Cuadra se considera de las islas Feroe (por aquello del bacalao tan caro a los vascos o de las ensoñaciones de su correligionario Azcárraga) o de Madagascar. Lo que me llama la atención es que ese rechazo a una Vuelta "extranjera" no se haya producido cuando el Tour de Francia -1977 a Vitoria, 1992 a San Sebastián- llegó a Euskadi Sur. ¿O es que ahora no somos España pero sí Francia? Pensaba yo que los del tripartito y demás familia ni siquiera consideraban Francia a Iparralde, pero debía de estar equivocado.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 16 de diciembre de 2008