La consejera de Justicia de la Junta de Andalucía, Evangelina Naranjo, retó ayer al juez decano de Córdoba, Luis Rabasa, a que cumpla su amenaza de reducir los señalamientos de juicios en 2009 por el colapso judicial: "Él es un poder del Estado. Que lo haga". El enfrentamiento entre la Junta de Andalucía y los jueces surgió tras aprobar el Tribunal Superior de Justicia un informe que acusa al Gobierno andaluz de incapacidad para gestionar la plantilla de los juzgados.
La portavoz del Consejo del Poder Judicial, Gabriela Bravo, lamentó las medidas "tan drásticas" propuestas por Rabasa y confió en que no se lleven a cabo.
En la reunión del CGPJ con 11 comunidades autónomas, Naranjo propuso que los tres poderes del Estado firmen un manifiesto para demostrar a la ciudadanía que trabajan por mejorar la Justicia. Esta petición responde a la mala opinión que los ciudadanos tienen de los jueces, según el CIS.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 19 de diciembre de 2008