Los casos de ciudadanos con pisos de protección oficial asignados pero que no pueden comprarlos porque el banco les deniega la hipoteca deberían pasar a la historia si la Generalitat despliega al completo un nuevo plan anticrisis aprobado ayer por el Gobierno. El Consell Executiu dio luz verde a un programa transitorio de garantía de riesgo de las entidades financieras en las ventas y adjudicaciones de viviendas protegidas. La garantía del Gobierno le compromete a volver a comprar los pisos protegidos si sus adjudicatarios dejan de pagar la hipoteca.
El plan forma parte de un paquete de medidas, algunas de las cuales ya habían sido avanzadas, que incluye adelantar las subvenciones para la rehabilitación de viviendas. En concreto, el Gobierno avanzará hasta el 60% de las subvenciones aprobadas entre 2006 y 2008 aunque las obras no estén terminadas. El 40% restante se aportará una vez los trabajos finalicen.
La Generalitat también está estudiando, aunque no ha aprobado, ampliar el plan del Gobierno central para ayudar a pagar la hipoteca a las familias en paro. La ampliación consistiría en cubrir las hipotecas de hasta 170.000 euros en lugar de los 140.000 que pretende cubrir el Gobierno central.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 24 de diciembre de 2008