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Maneras de celebrar el nuevo año

Un traslado con polémica

Deficiencias en el sistema informático, denuncias de falta de plantilla suficiente para atender a los enfermos, laboratorios a medio equipar, retraso de varias semanas en la puesta en marcha de la diálisis... El nuevo hospital Puerta de Hierro, en Majadahonda, nació envuelto en polémica. Fue el último de los ocho flamantes hospitales de Esperanza Aguirre en ser inaugurado, el pasado 11 de septiembre. En realidad, no se trataba de un nuevo hospital, sino de un traslado. El viejo Puerta de Hierro, construido en 1944, se había quedado antiguo. Así que se construyó un nuevo edificio en Majadahonda y se trasladó el hospital, con la mayoría de sus 2.600 trabajadores, a 16 kilómetros del antiguo. Incluso se trasladó en ambulancias a los últimos pacientes hospitalizados. Las urgencias abrieron el 1 de octubre.

Y los problemas no tardaron en presentarse. El sindicato de médicos, poco proclive a airear deficiencias en público, remitió una carta a la gerencia alertando de "la situación grave" y "con riesgos de empeorar" del hospital. La plantilla de urgencias era "deficitaria" y había riesgo de "colapso".

El hospital (613 camas para 450.000 habitantes) arrancó con prisas y con deficiencias: sin radiología, con la mayoría de quirófanos inutilizados, etcétera.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 2 de enero de 2009