Cuando las obras de arte se desligan de su firma, lo que queda es su identidad genuina en tanto que producto nacido de la sensibilidad y la imaginación. Incluso la singularidad que hace reconocible la obra del cambadés Francisco Leiro (1957) se transforma en otra cosa si se logra, por un momento, obviar trayectoria y contexto para fijarnos exclusivamente en el significado esencial del objeto artístico.
Y si una pieza como Capa (1999) se compara con la producción de otro artista con la que es posible establecer relaciones de semejanza o complementariedad, en este caso Integración nº1 de Rafael Baixeras (Pobra do Caramiñal, 1947-Segovia, 1989), se amplían las posibilidades.
La primera gran exposición de 2009 en el Centro Cultural Caixanova de Vigo, titulada Parellas, realiza ese proceso confrontando nueve esculturas con ocho pinturas y una fotografía. Las piezas, todas de artistas internacionales datadas desde comienzos de los 80, proceden de una colección particular establecida en Vigo e iniciada hace 25 años.
Leiro y Baixeras
La comisaria de la muestra expuesta en Vigo, la historiadora del arte y galerista Mónica Iglesias, ha podido trazar estos paralelismos dado su profundo conocimiento del fondo, compuesto por unas 400 piezas, en cuya catalogación y conservación ha trabajado en numerosas ocasiones. Las simetrías que enlazan a Leiro y Baixeras se convierten, en otro momento de la exposición, en dos visiones sobre el sometimiento de las mujeres en las obras en diálogo de Carmen Calvo (Valencia, 1950) y Rui Chafes (Lisboa, 1966); mientras que el espacio dislocado une a Luis Gordillo (Sevilla, 1934) con Fernando Sinaga (Zaragoza, 1951). La nómina de artistas participantes incluye, entre otros, al dúo alemán Winter & Holbert, a Fernando Casas (Gondomar, 1946) y a la catalana Susana Solano (1946).
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 16 de enero de 2009