La industria del automóvil en EE UU afronta una situación crítica, como atestiguan las pésimas cifras de ventas que se divulgaron ayer. Chrysler (un 55% menos), GM (49%) y Ford (40%), los tres gigantes de Detroit, registraron en enero un brusco descenso de ingresos respecto al mismo nivel del año pasado.
Con estos datos, las compañías estiman que en 2009 apenas se venderán 9,6 millones de vehículos en EE UU, la cifra más baja en 27 años. El Gobierno estadounidense ya concedió créditos multimillonarios a Chrysler y GM para evitar su colapso.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 4 de febrero de 2009