En Europa suena, cada vez con más fuerza, la posibilidad de una reactivación del negocio nuclear. Y las grandes empresas europeas están preparando el terreno. Por el momento, el terreno de pruebas es Reino Unido y su plan de construcción de centrales. En este contexto, Iberdrola anunció ayer que ha cerrado un acuerdo con el grupo francés GDF Suez -propietario del 8,8% de Gas Natural- para participar en el programa nuclear de Reino Unido. Es el último acto de un proceso de agrupación del que están saliendo tres grandes grupos: Iberdrola-GDF Suez (más la británica Scottish and Southern Energy); las alemanas RWE y E.ON y los grupos Centrica más el francés EDF (propietario de British Energy).
El acuerdo de Iberdrola con GDF Suez -ultimado en la reciente cumbre de Davos por los máximos responsables de las compañías- incluye la creación de una sociedad conjunta entre el grupo presidido por Ignacio Sánchez Galán y la compañía francesa, propietaria de cuatro plantas nucleares en Francia y Bélgica.
La sociedad conjunta hispano-francesa tendrá, a su vez, el 80% de la compañía que presente su candidatura para adquirir los emplazamientos nucleares en manos de la Nuclear Decommissioning Authority (NDA) y de EDF, que está obligada a vender activos tras la compra de British Energy. El 20% restante del consorcio corresponderá a Scottish and Southern Energy.
El consorcio formado por Iberdrola y GDF, como el resto, acudirán a la subasta de tres emplazamientos para centrales en Wylfa (Norte de Gales), Oldbury (en el Suroeste) y Bradwell (Sureste). Para Iberdrola, la opción nuclear de Reino Unido es una baza importante en relación con la estrategia de crecimiento y de diversificación en Europa en los próximos años.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 5 de febrero de 2009