El Ayuntamiento de A Coruña sigue adelante con sus planes para peatonalizar la Ciudad Vieja, aunque será sólo parcial en un primer momento y se retrasa hasta el verano una medida anunciada para enero pasado. Es el único casco histórico urbano de Galicia en el que los coches campan a sus anchas. Según la propuesta que entregó ayer a las asociaciones de vecinos y comerciantes el concejal de Tráfico, Florencio Cardador, sólo los residentes, en un primer momento, podrán circular por las estrechas calles fuera del horario de carga y descarga, entre las 6 y las 11 de la mañana.
El plan, que tardará más de tres meses en ponerse en práctica, incluye habilitar para los vecinos zonas de aparcamiento fuera del perímetro del barrio medieval, en la zona de Maestranza donde está el Rectorado, así como en cinco o seis calles en el interior del casco viejo. Los residentes deberán obtener una tarjeta para circular o aparcar en esas áreas habilitadas. Esta sería una medida provisional, ya que el objetivo es alcanzar, destaca Cardador, "la peatonalización total" de un barrio monumental muy afectado por el tráfico.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 10 de febrero de 2009