La policía ha desarticulado una banda internacional especializada en la falsificación de tarjetas de crédito y estafas por Internet para conseguir datos bancarios. En la operación, que ha terminado con 15 detenidos (12 rumanos y tres españoles) y registros a siete domicilios en diferentes municipios de la región, han participado desde la comisaría de Coslada hasta el servicio secreto de Estados Unidos, la policía de Nueva York y el agregado de Interior de Rumania en España. La policía ha desmantelado el taller donde se creaban las tarjetas falsas.
La red falsificaba las tarjetas y se las entregaba a los tres detenidos españoles (que no tenían antecedentes), para que las utilizaran sin levantar sospechas. Para conseguir los datos bancarios de las tarjetas, los detenidos acudían a expertos informáticos rusos y ucranios, que están en búsqueda internacional. El valor de la estafa puede superar los dos millones de euros, con afectados por todo el mundo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 11 de febrero de 2009