"¿Tu vida es un cómic lleno de gilipolleces?", exclama en la cumbre de su irritación y tras estamparle uno de sus volúmenes en la crisma, una de las amantes de Ramón Boldú al final de El arte de criar malvas (Astiberri), tercer álbum autobiográfico del historietista catalán. Siguiendo el ejemplo canónico de Robert Crumb, Boldú parece haber comprendido que las miserias sexuales y las tragicómicas derivas del afecto proporcionan un material de primera para la autoficción: pero en ese registro las bromas son a cuenta del propio artista, cuya imagen no suele salir bien parada.
Boldú podría tener su contrapunto cinematográfico en Chris Waitt, mente pensante de Fur TV -respuesta MTV a El show de los Teleñecos- y grimoso clon de Kurt Cobain: en La historia completa de mis fracasos sexuales, presunto documental con evidentes articulaciones falseadas, Waitt intenta hacer lo mismo que Boldú -la crónica de su antiépica amorosa-, pero tras una presunta autoficción que flirtea con el patetismo, hay la poco convincente construcción de un personaje. En suma, mucha pose y poco dolor.
LA HISTORIA COMPLETA DE MIS FRACASOS SEXUALES
Dirección: Chris Waitt.
Género: documental. Reino Unido, 2008.
Duración: 90 minutos
Waitt intenta (y, a veces, consigue) entrevistar a sus ex novias para discernir en qué ha fallado: la respuesta resulta tan evidente como palpables son los recursos que invitan a la desconfianza -de los interludios seudocómicos de la dominatrix y el consumo imprudente de Viagra al postizo happy end indiero-mántico- en este ejercicio de narcisismo que, sin duda, encontrará su público cómplice.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 13 de febrero de 2009