El bajo coste no está reñido con la calidad. Éste es el mensaje que la cadena alemana de supermercados de descuento Lidl ha intentado transmitir en su última campaña promocional, que lleva por lema No se engañe, la publicidad no es cara.
La campaña arrancó el 1 de febrero e incluye tres anuncios distintos que podrán verse sucesivamente en los próximos meses. Una de las novedades es que, por ejemplo, en los anuncios de prensa ya no salen las imágenes de los productos, sino un señor que canta las bondades de la marca. "Con esta acción, Lidl pretende fortalecer uno de los atributos básicos de la compañía, la calidad de sus marcas propias, y al mismo tiempo transmitir al consumidor que adquirir productos de calidad no tiene por qué salir caro", explican fuentes de la compañía alemana. En un momento en que otras cadenas de descuento, como Mercadona, han dado un tijeretazo a la comercialización de marcas, Lidl, que prescinde también de las primeras enseñas, pretende que cale en los consumidores españoles la idea de que proporciona "calidad idéntica" a la de las marcas líderes "a un precio muy competitivo" apoyándose en un modelo de negocio que persigue la optimización de los procesos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 15 de febrero de 2009