Han sido menos, pero han sido los mejores. Ésa es la conclusión de la organización del Congreso Mundial de Telefonía Móvil que cerró ayer en Barcelona. La feria ha registrado más de 47.000 visitantes de 189 países, el 14,5% menos que en 2008, cuando se alcanzó la cifra de 55.000.
"Las empresas han mandado a sus mejores empleados. Ésta ha sido la mejor edición del Mobile World Congress. Nuestros clientes han movido un importante volumen de negocio", afirmó ayer Françoise de Valera, directora de la organización.
De momento, a diferencia del mal sabor de boca que ha dejado la marcha de la feria de moda Bread & Butter, los móviles sí volverán a Barcelona el próximo febrero. Ya ha quedado reservado el 70% del recinto ferial de Montjuïc. Además la organización asegura que han logrado pulir dos de las quejas más habituales de los visitantes: la seguridad y los taxis.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 20 de febrero de 2009