Es un espectáculo sobre el que se pueden hacer muchas lecturas, al margen de las obvias. Un montaje lleno de originalidad, divertido hasta el desternille, fresco, al tiempo que vitriólico, que emana de lo que en Cádiz se conoce como chirigotas ilegales, que no participan en ningún concurso oficial y tienen un gran espíritu crítico también en lo social.
El dramaturgo y director Antonio Álamo conoció a La Chirigota de las Niñas en un bar. Insólitamente el grupo estaba formado sólo por mujeres, provenientes del mundo universitario, y le sorprendió la calidad de las letras de Ana López, hoy conocida en circuitos alternativos o como actriz de La Zaranda, cuya inspiración le llega de lo que pasa en la calle. Juntos crearon Chirigóticas, que llega el martes al Teatro Alfil. Las estupendas actrices Pepa Rus, Ana López Segovia, Alejandra López Segovia y Teresa Quintero arrojan sobre el escenario el espíritu crítico del carnaval, marcado por la irreverencia, la espontaneidad, la libertad, la frescura y la risa, mucha risa.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 8 de marzo de 2009