Chico, de casi 17 años, español y con varios robos con violencia en su memoria delictiva. Es el perfil medio del menor que ingresa en alguno de los siete centros de reeducación de la Comunidad Valenciana. En 2008, la cifra creció un 25,2% respecto a la del año anterior. Explicación: la mayor imposición de este tipo de régimen por parte de los jueces. Así, al menos, consta en la memoria presentada ayer por la consejera de Justicia, Paula Sánchez de León.
Los siete centros atendieron en 2008 a un total de 894 menores, frente a 714 en 2007. El 47,6% de ellos en la provincia de Valencia, el 39,9% en la de Alicante y el 12,4% en Castellón. De los 894 menores atendidos, 777 son varones y 117, mujeres. Y la edad media subió respecto de años anteriores en cuatro menos, se coloca en casi 17 años. Esos menores son, salvo en 23 casos, residentes en la Comunidad Valenciana.
El 68,3% de los menores atendidos el año pasado fueron españoles
Frente a los estereotipos, las cifras: el 68,3% de los menores que el pasado año fueron atendidos son españoles; el 31,7, extranjeros. Es cierto que el porcentaje de este último colectivo creció el pasado año de forma importante, 56,36% respecto de 2008.
El 21,9% de los menores extranjeros que fueron atendidos en estos centros durante 2007 procedían de Rumanía; el 20,9% de Marruecos; el 17% de Colombia; el 14% de Ecuador; el 6% de Argelia y el resto de países como Argentina o Reino Unido.
¿Qué delitos acumulan los menores que acaban en un centro de reeducación? Según la memoria de Justicia, el 37% cometieron robos con violencia e intimidación; el 11% robos con fuerza; el 10% lesiones; el 8% maltrato familiar; el 5% hurto y el 4% agresiones sexuales. Los robos con violencia son la tipología delictiva que más se ha incrementado en el grupo de menores atendidos en los centros de reeducación el pasado año, un 10%.
En 2008, los jueces dictaron 1.169 medidas de internamiento (99 más que en 2008), 346 de las cuales fueron cautelares y 823, firmes. Según Sánchez de León, el 30% de los menores que son atendidos en los centros de reeducación reinciden. Y 146 de ellos lograron un contrato laboral firme al abandonar el centro, aunque según la consejera, esa es la "asignatura pendiente".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 10 de marzo de 2009