"La educación artística es mucho más que clases, exámenes, información, técnicas, pintores, corrientes o movimientos", sostiene Manuel Molins, dramaturgo y profesor del IES Benlliure, el céntrico instituto de Valencia que ha cumplido 40 años de prolífica aventura educativa y en cuyas aulas se han forjado un buen puñado de artistas actuales.
De entre ellos, los 52 antiguos alumnos y profesores, artistas de todas las técnicas y tendencias -desde la escultura al fotomontaje, la abstracción al realismo, con obras que van del constructivismo a la nueva figuración, la transvanguardia, el pop o el minimalismo- que se han reunido en este "homenaje" a lo que ha sido su alma máter, el Benlliure. Un instituto de enseñanzas medias sólo para hombres, creado por decreto franquista en 1962 y bautizado con el nombre del ilustre escultor valenciano del XIX Mariano Benlliure. Aunque su masculinidad duró más bien poco. En 1968 -año de profundo simbolismo político y social y las revueltas estudiantiles en medio mundo- el Benlliure se quitó el corsé de centro "masculino" y pasó a ser un potente instrumento de formación mixta en el corazón de Valencia.
Varias leyes educativas y otras tantas reformas estructurales dieron forma en el 2000 al "moderno Benlliure", edificado sobre los terrenos del anterior, en la calle de Alboraia.
La exposición Art Ben Lliure / Arte Bien libre es, pues, un homenaje de sus ex alumnos a una educación que trasciende lo académico para convertirse en "una profunda formación para la vida, el placer, el trabajo, el juego, el amor y la amistad". Además de un vivero de libertad y pluralidad acorde con el renacentista claustro de La Nau, el espacio de la Universitat de València que desde hoy acoge este viaje por la intrahistoria del Benlliure.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 12 de marzo de 2009