Los tres tripulantes de la Estación Espacial Internacional (ISS) se refugiaron ayer, durante 10 minutos, en la nave salvavidas Soyuz atracada en la base, como precaución por la proximidad de un fragmento de basura espacial. Una vez pasado el peligro, los astronautas (Michael Fincke, Sandra H. Magnus y Yuri Lonchakov) abandonaron la Soyuz y reanudaron las operaciones normales de la ISS.
El fragmento, se supo después, medía aproximadamente un centímetro y pasó a unos cuatro kilómetros de la estación. El procedimiento de emergencia se activa cuando la distancia de un trozo de basura es de seis kilómetros o inferior. Incluso una pieza tan pequeña es peligrosa porque puede perforar la estación y provocar su despresurización.
No es el primer sobresalto en la ISS por la basura en órbita. El 17 de noviembre pasado los astronautas se refugiaron también en la Soyuz por un trozo de un cohete que pasó a 19 kilómetros.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 13 de marzo de 2009