El día después de que un estudio de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) alertara de que tres de cada cuatro menores compran alcohol sin problemas, el Ayuntamiento de Bilbao anunció mano dura contra estas prácticas. El alcalde Iñaki Azkuna anunció que se pondrá en marcha un programa para que la Policía Municipal vigile la venta de alcohol a los menores.
En el pleno municipal celebrado ayer, el consistorio aportó datos sobre este asunto. Aseguró que se han abierto en los últimos cuatro años un total de 35 expedientes sancionadores a diversos locales por vender alcohol a menores. Las sanciones previstas para esta infracción son multas que van desde los 1.000 a 2.000 euros en los casos más leves; de 15.000 euros, con cierre de un mes, en caso de reincidencia, la clausura del establecimiento durante un plazo de tres años para los casos más graves.
Los locales sancionados pueden ser tanto tiendas como bares o supermercados. En Bilbao fueron cinco los locales sancionados en 2005 y 2006, seis en 2007, 18 en 2008 y uno en lo que va de 2009.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 27 de marzo de 2009