La pasión de Sebastián Nicolau por el jazz ha articulado musicalmente su trabajo artístico. Descubrió hace 30 años al trompetista Miles Davis, de quien es un gran admirador. Y quedó impresionado por su disco Workin, grabado en 1956: "Me sorprendió al sugerirme emociones de perplejidad, sorpresa y silencio", explica Nicolau. Quizá por ello ha dado el mismo nombre a su última exposición, cuyas obras, dicen los expertos, desprenden musicalidad. El jazz lo impregna todo en su universo de espacios y formas. Workin, en la que se agrupan un total de 74 obras -reúne 21 óleos, 24 dibujos, siete collages y 22 esculturas-, resume la actividad desplegada por el artista valenciano en la última década. Las notas musicales sirven de pretexto a Nicolau para configurar un universo plástico dotado de una profunda expresividad, pese a la aplicación sobria y controlada del color en su obra.
EXPOSICIÓN: SEBASTIÁN NICOLAU. WORKIN
Muestra de óleos, dibujos, collages y esculturas del valenciano Sebastián Nicolau. IVAM, en Guillem de Castro, 118. De martes a domingo, de 10.00 a 20.00. Hasta el 17 de mayo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 7 de abril de 2009