Doce hombres fueron detenidos ayer en varias redadas en Liverpool, Manchester y Lancashire en una operación antiterrorista que se tuvo que efectuar antes de lo planeado tras un descuido policial.
Bob Quick, un alto responsable antiterrorista, se dejó fotografiar a su llegada a Downing Street con unos papeles bajo el brazo en los que se leía "secreto", se describía la investigación de un plan de ataque de Al Qaeda en Reino Unido, y se señalaba a 10 paquistaníes con visados de estudiante y un británico para su detención.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 9 de abril de 2009