El encargo de arreglar la enseñanza que le encomendaron a la ministra Mercedes Cabrera ya era de por sí difícil. Pero cuando en su segundo mandato, frente a esta problemática cartera ministerial, le endosaron los asuntos sociales y le sustrajeron los universitarios (yo en su lugar habría dimitido), ya advertimos la Asociación de Profesores de Secundaria (APS) del grave error cometido al desnaturalizar el Ministerio de Educación y Ciencia, MEC, que hubo que llamar ¡MEPSYD!
¿Pudo hacerlo mejor Mercedes Cabrera? La respuesta no "está en el viento".
Ha hecho bien el presidente Rodríguez Zapatero en llevarse el deporte, segregar de nuevo el complicado tema también de los asuntos sociales y devolver lo que claramente pertenece a la enseñanza: la Universidad.
Esperamos que el nuevo ministro, Ángel Gabilondo, aunque proceda de la Universidad, sepa no sólo arreglar el asunto Bolonia, sino también el problemático curso de la enseñanza secundaria y la necesaria mejora de las condiciones laborales de su profesorado.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 15 de abril de 2009