La economía española sufrirá este año un sonoro batacazo del 3%, pero el panorama comenzará a ser menos sombrío a partir de la segunda mitad del año. Ése es el diagnóstico que lanzó ayer para España el Fondo Monetario Internacional (FMI), que considera vulnerables a las cajas de ahorros por la presión del ladrillo.
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 23 de abril de 2009