El Ayuntamiento de Poio recurrirá la resolución del Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 2 de Pontevedra que anula el realojo de dos familias gitanas en la parroquia de Caritel, en Ponte Caldelas. El alcalde de Poio, Luciano Sobral, rechaza así las peticiones de las familias realojadas, que reclamaban un emplazamiento distinto ante el "acoso" de los vecinos de Caritel.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 24 de abril de 2009