El Gobierno central y las comunidades autónomas lograron un acuerdo la pasada semana para aplicar la revisión de la Política Agrícola Común (PAC) aprobada el pasado año por Bruselas.
Este compromiso afecta fundamentalmente a la puesta en marcha de los planes de mejora para los sectores con mayores problemas en las nuevas disponibilidades financieras que tendrá cada país a partir de este año. En España, además de los fondos por la aplicación de la modulación o recorte de los pagos directos, la Administración contará cada año con otros 144 millones de los fondos asignados a un país y que no se gastan.
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 27 de abril de 2009