Unos 2.000 trabajadores del sector del metal, en su mayoría de la construcción naval, volvieron a manifestarse ayer por las calles de Vigo coincidiendo con el final del encierro que mantuvieron en la sede local de la Xunta, durante seis días, varios delegados sindicales para pedir el desbloqueo de las negociaciones del convenio. El paro y la manifestación de ayer, según los sindicatos, fue sólo una primera "demostración de fuerza". Para la próxima semana hay convocadas dos jornadas de huelga. El convenio afecta a unos 27.000 trabajadores de Pontevedra y está pendiente de negociarse la regulación de jornada y los incrementos salariales.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 30 de abril de 2009