La Xunta negó ayer "taxativamente" que "se esté anticipando al pago único" que van a recibir los agricultores y ganaderos. El Gobierno que preside Alberto Núñez Feijóo tuvo que corregir en un comunicado lo expresado un día antes en otra nota, cuando anunció que adelantaría "70 millones de euros para que todas las explotaciones ganaderas puedan, a partir del mes de junio, comenzar a percibir el dinero que proviene de la Unión Europea y que no podrían percibirse hasta el año que viene". El matiz es importante: países como Alemania, Bélgica, Holanda y Lituania ya habían tenido la misma idea al solicitar a la Comisión Europea medidas similares. La respuesta de la comisaria Fischer Boel fue un jarro de agua fría a sus aspiraciones ya que, como mucho, la fecha autorizada más cercana para los anticipos sería el 16 de octubre.
El toque de atención a Feijóo se produjo ayer desde el Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino, dirigido por la gallega Elena Espinosa, que acusó al nuevo presidente de la Xunta de "precipitación", a la hora de hacer el anuncio.
La reacción desde Santiago no se hizo esperar. La Consellería de Medio Rural, además de matizar que la ayuda financiera iría acompañada del correspondiente convenio con bancos y cajas para que éstas posibiliten el acceso a préstamos, aseguró que se realizará dentro del reglamento de minimis de acuerdo con la normativa europea. La norma de minimis significa que ciertas ayudas inferiores a 200.000 euros están exentas de ser notificadas a la Comisión Europea y, por lo tanto, del control comunitario para comprobar si son compatibles con el mercado común. "El Gobierno gallego se ampara en el reglamento comunitario para garantizar la legalidad de esta medida. De esta manera, se pondrá a disposición de los titulares de las explotaciones de leche un mínimo de circulante que les permita subsistir", aseguró Medio Rural.
Lo que no está claro es si la Comisión dará por buenos los argumentos gallegos, dado que, expresamente, el reglamento de minimis deja fuera las "ayudas a la producción primaria de productos agrícolas", además de otras vinculadas a la exportación, al sector del carbón, la adquisición de vehículos o las empresas en crisis.
El acceso a préstamos se realizaría, según la Xunta, "por importe similar al pago único", y se les financiarían a partir del mes de junio los tipos de interés. Todo para ayudar a paliar "en el marco de las reglas del mercado único", las "devastadoras consecuencias que para Galicia está teniendo la caída de los precios de la leche".
Junto a este compromiso, Feijóo prometió que en el plazo de un mes y medio estarían abonadas todas las ayudas autonómicas que los ganaderos tienen pendientes desde 2008.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 13 de mayo de 2009