Dentro de poco conoceremos al próximo presidente del Real Madrid. Sé que llegará rodeado de consejos y consejeros, pero permitan que yo también ofrezca la visión de un sencillo aficionado al fútbol. De la colección de cromos que a diario profetizan los medios deportivos sólo es posible extraer un rasgo común: su precio escandaloso. Y digo yo, ¿no sería mucho mejor armar un equipazo fichando sobre todo a jugadores españoles? Puestos a gastar dinero, ¿por qué no gastarlo aquí? Cuando se habla de la rentabilidad económica de los proyectos deportivos habría que entender que en deporte pocas cosas son tan rentables como la victoria, y si la selección se proclamó campeona de Europa fue también por la grandísima calidad de los jugadores españoles.
Es invertir sobre seguro, es facilitar el futuro acoplamiento de las nuevas incorporaciones, es dejar de preocuparse por los constantes viajes de fulanito y menganito, etcétera. Me encantaría ver jugar juntos a cinco o seis de los titulares de la selección española. Se me ocurre que éste sería también un equipo a batir.
Y seguro que el precio de este proyecto es menor que el de traer a Kaká, Cristiano Ronaldo y Riveri. Quizá sea un nostálgico, pero todavía recuerdo las proezas deportivas de aquellas legendarias alineaciones: Camacho, Santillana, Juanito... Michel, Gordillo, Butragueño... ¿Qué tal, futuro presidente, otra alineación "seleccionable?".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 17 de mayo de 2009