El ministro de Fomento, José Blanco, aseguró ayer en Getafe que va a acelerar la puesta en marcha del Plan de Cercanías, con el que el Gobierno pretende ampliar la red de trenes de la región. Ésta es una vieja promesa de los socialistas, que ya llevaba en su programa el Partido Socialista de Madrid (PSM) cuando Rafael Simancas se presentó por primera vez a la presidencia, en 2003. Después, José Luis Rodríguez Zapatero la hizo suya cuando llegó en 2004 al Gobierno.
El plan definitivo, que lo va a presentar el Ministerio de Fomento el próximo miércoles, prevé hacer una inversión de 5.000 millones para la red de ferrocarriles.
Blanco, que acudió a un acto de los socialistas madrileños en Getafe, afirmó que ha puesto a trabajar en este proyecto al nuevo presidente de Renfe, Teófilo Serrano. "Ésa es la apuesta que vamos a hacer aquí en Madrid", destacó. Otra vieja promesa del Ejecutivo central es la transferencia de la gestión de la red a la Comunidad de Madrid.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 18 de mayo de 2009