El marinero Francisco Javier Jiménez, de 57 años, natural de Barbate (Cádiz), perdió la vida a primera hora de la mañana de ayer tras naufragar la embarcación de bajura con la que faenaba frente a la costa de Zahara de los Atunes (Cádiz), como consecuencia de una vía de agua.
Sus tres compañeros pudieron ser rescatados con vida, pasadas las nueve de la mañana, unas dos horas después del siniestro, por una embarcación de recreo que navegaba en la zona y oyó los gritos de auxilio de los supervivientes.
Todos ellos habían logrado amarrarse a boyas y objetos flotantes de la embarcación para permanecer en la superficie.
A falta del informe del forense, el marinero muerto pudo sufrir un infarto como resultado de la tensión vivida o las bajas temperaturas del mar. De hecho, uno de los tres supervivientes tuvo que ser conducido, una vez rescatado, a un centro hospitalario donde se le atendió de una hipotermia aguda.
La embarcación siniestrada, llamada Cristo, de seis metros de eslora y perteneciente a la flota artesanal del Mediterráneo, tenía base en el puerto de Tarifa, aunque toda su tripulación residía en Barbate.
El cuerpo del pescador fallecido fue trasladado a primera hora de la tarde de ayer al tanatorio de la Zona Franca de Cádiz, donde hoy se le practicará la autopsia. Sus restos serán enterrados a las 17.30 horas en el cementerio de Barbate. Tenía mujer y tres hijos. El Ayuntamiento de Barbate ha declarado el de hoy como día de luto oficial.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 21 de mayo de 2009