La inversión realizada en infraestructuras en la Comunidad Valenciana a través de los Presupuestos Generales del Estado siempre genera un impacto en la inversión privada. La Delegación del Gobierno de la Comunidad Valenciana ha analizado ese efecto empleando una estimación con indicadores de la OCDE, que, tras confrontar los efectos negativos con los positivos, arrojan un efecto neto de 0,21 euros adicionales de inversión privada por cada euro de inversión pública.
En la última legislatura del PP, entre 2001-2004, los Presupuestos Generales del Estado destinaron a la Comunidad Valenciana, en infraestructuras, 4.210,63 millones de euros. A partir de ese parámetro, esta inversión generó 884,2 millones de euros adicionales de inversión privada.
Sin embargo, esta cifra casi se dobla en la siguiente legislatura (2005-2008), en la que se generaron 1.570 millones de euros adicionales de inversión privada a partir de los 7.476,77 millones invertidos por el Estado en la Comunidad Valenciana en el mismo concepto.
Siguiendo ese planteamiento, el informe de la Delegación del Gobierno calcula este mismo indicador para 2009, a cuyo presupuesto añade la inversión del Fondo Estatal de Inversión Local y el Plan E (3.416,31 millones), generando un impacto de 717 millones, cifra que roza la generada ente 2001 y 2004.
El estudio, a partir de los datos obtenidos por el Instituto de Análisis Económico del CSIC hasta 2004, realiza una proyección hasta 2008 sobre cuál ha sido la contribución de la inversión en infraestructuras al crecimiento del PIB valenciano, y una comparativa con los Presupuestos de las legislaturas anteriores. Así, en el período 1993-1997, la aportación fue del 0,50%; entre 1997 y 2001, bajó al 0,38%; de 2001 a 2004, se redujo hasta el 0,34%, mientras que entre 2004 y 2008, recuperó fuelle hasta el 0,57%.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 25 de mayo de 2009