Óscar Sánchez, vecino de Alpedrete (12.000 habitantes), comenzó el jueves una huelga de hambre como medida de protesta hacia el Ayuntamiento de este municipio del noroeste madrileño. Según afirma Sánchez, el Consistorio debe cinco meses de pagos a su empresa, responsable del servicio de cafetería del centro de mayores de la localidad.
Sánchez asegura que las condiciones que firmó en su momento con el Ayuntamiento "no se están cumpliendo" y que no le pagan. El vecino asegura que el Consistorio le ha amenazado con ponerle "una querella por daños y prejuicios" y abrirle un expediente tras no haber prestado sus servicios los pasados días 1 y 2 de mayo. "Encima de que llevan cinco meses sin pagarme", asegura incrédulo, "me van a sancionar".
El vecino dijo ayer que ningún responsable del Ayuntamiento se había dirigido a él para intentar llegar a un posible acuerdo o para encontrar una solución a su problema. "Ni siquiera los de Servicios Sociales han venido para interesarse por mi salud", se quejó. El hombre tiene previsto continuar con la huelga de hambre que comenzó el jueves hasta que el Ayuntamiento le pague y pueda rescindir el contrato que le vincula con el gobierno municipal, que finaliza en octubre.
Este periódico intentó ayer, sin éxito, conocer la opinión del Ayuntamiento de la localidad.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 25 de mayo de 2009