El Consell se inspira en los Fueros del Reino de Valencia, vigentes entre 1261 y 1707 para desarrollar el Estatuto de Autonomía del siglo XXI. A la vuelta de la figura del Pare d'Orfens, de la regulación foral de las sucesiones o del régimen económico matrimonial valenciano sigue la recuperación de una serie de contratos agrarios "forales típicamente valencianos" a través de una ley de derecho patrimonial que anunció ayer en las Cortes el consejero de Gobernación Serafín Castellano. La nueva ley "buscará regular" fórmulas de contrato como el engany a mitges, la venta a l'ull o per alfarrasar y la venta al peso o per aprovat.
La exposición del consejero de Gobernación sobre las líneas de actuación en materia de desarrollo estatutario estuvo plagada de tracas. Los actos con ocasión del año dedicado a Jaume I en favor de "la autoestima y el orgullo" de los valencianos; la creación de una cátedra de Derecho Foral Valenciano en la Universidad Internacional Valenciana que será "referente académico internacional"; o la defensa "de la cultura del fuego y del uso de los artículos pirotécnicos".
Más allá del ruido, Castellano confirmó que la Generalitat aspira a participar en la gestión de los aeropuertos pero que "estudia" gestionar los trenes de cercanías si recibe dinero. También insistió en que el Consell aspira a "gestionar los permisos de trabajo y residencia por arraigo de los extranjeros en la Comunidad Valenciana".
El Consell impulsa también una ley de consultas populares; la creación de una oficina electoral valenciana que organizará las elecciones autonómicas; y un Servicio Tributario Valenciano que "será el encargado de la aplicación de los tributos propios de la Generalitat y de la gestión de los tributos cedidos". Pero siempre "respetando los principios de multilateralidad, autonomía, suficiencia y solidaridad", apostilló Castellano, "a diferencia de la Agencia Tributaria de Cataluña, que aplica un sistema de financiación insolidario".
El socialista Toni Such resumió: "Tenemos un buen Estatuto pero un mal Gobierno que nunca ha tenido ningún interés por desarrollarlo".
Enric Morera, de Compromís, también lamentó la falta de "ambición" del Consell y dijo: "Fuimos los primeros en llegar a ninguna parte".
Mientras que Lluís Torró, de Esquerra Unida, pidió detalles sobre el Servicio Tributario Valenciano y solo supo que estará vigente en 2010.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 26 de mayo de 2009