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Venus es amarilla y Adonis verde en la iconografía de Rosa Torres (Valencia, 1948). Pero también pueden ser naranja la diosa del amor y morado su bello cazador. Eso sí, la lluvia de oro que cae sobre un rojo Dànae es dorada. La paleta de colores con la que la pintora aborda sus propias interpretaciones de los mitos, Leda i el cigne, Les tres gràcies, Venus al bosc o Jasó i els argonautes, es brillante, mediterránea, explosiva. Un homenaje a los mitos y a los cuadros de los grandes maestros que más la fascinan. Hasta la más atemperada versión de La maja desnuda (por ella titulada Venus) administra la sensualidad con un atrayente carmesí. La segunda parte de la exposición Figures i paisatges, que hoy se inaugura en Carlet, recrea con igual contundenciay decisión a base de cuatro gruesos trazos negros y un arcoíris eterno los inconfundibles escenarios del Mediterráneo. Pinos, barcos y el mar. Y montañas imponentes. Y un olivo rojo y azul.
FIGURES I PAISATGES
A las 20.00 se inagugura la retrospectiva de la pintora valenciana Rosa Torres en la sala de exposiciones de la Casa de Cultura de Carlet. Plaza de la Vila, 1. Hasta el 30 de junio. De lunes a viernes de 9.30 a 13.00 y de 17.00 a 20.00.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 5 de junio de 2009