Unos 50 ex mineros de Boliden se encerraron ayer en la catedral de Sevilla para exigir a la Junta de Andalucía que cumplan con los acuerdos y los recoloque. El portavoz de los trabajadores, Juan José Fernández, explicó que accedieron a la catedral para comenzar el encierro aprovecharon la celebración de la procesión del Corpus Christi. Se colaron entre el cortejo de la procesión. Los ex mineros ya han mantenido una reunión con los responsables del templo, con los que ha acordado que su permanencia se prolongará hasta que se les "garantice una solución al problema". En la fotografía, una de las manifestantes sentada en la catedral.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 12 de junio de 2009