Vemos cómo actúan nuestros médicos en los hospitales y tenemos que felicitarles. Estando siempre rodeados de dolor y muchas veces con incomprensión por parte de algunos parientes, hacen una labor no sólo médica, no fácil siempre, sino también de orientación humana y psicológica. Gracias. No os desaniméis.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 13 de junio de 2009