La agresión de cuatro mossos d'esquadra a un hombre grabada con cámara oculta en la comisaría de Les Corts de Barcelona, no es un caso cerrado. La policía autonómica aún no podrá pasar página de ese polémico episodio de su historia porque la Fiscalía de Barcelona anunció, ayer, que recurrirá la sentencia dictada hace unos días por la Audiencia de Barcelona.
El tribunal condenó a tres de los cuatro agentes a pagar una multa de 600 euros por una falta de lesiones. Los agentes fueron absueltos, en cambio, de los delitos contra la integridad moral (torturas) y falsificación en documento oficial. El ministerio público sí les acusaba de esos delitos y pedía para todos ellos una pena de cinco años y nueve meses de cárcel.
El ministerio público acusa a los agentes de un delito contra la integridad moral
El recurso de casación que interpondrá la fiscalía se basa en dos argumentos: la existencia de una "infracción de la legalidad" y de un "error en la valoración de la prueba". En su opinión, la Sección Séptima de la Audiencia no analizó de forma adecuada el contenido de la grabación. Las imágenes fueron captadas por una cámara oculta que, ante las denuncias por malos tratos de varios detenidos, ordenó instalar el Departamento de Interior que lidera Joan Saura.
El vídeo se exhibió durante el juicio. En las imágenes se observa que los cuatro mossos agreden al detenido, Rubén Pérez, y le propinan patadas y puñetazos. La sentencia relata que, una vez llevado a la sala de cacheos, Pérez tocó a uno de los agentes, lo que motivó que todos se abalanzaran sobre él y le golpearan. El tribunal asegura que fueron "técnicas de reducción que comportaron algunos golpes propinados con los pies y que cesaron de inmediato una vez reducido".
No hubo, por tanto, y según la sentencia, delito de torturas. Además, la Audiencia justificó que los mossos redactaran un atestado que no se correspondía con lo ocurrido para justificar los golpes. "Muchos atestados policiales exageran o sobrevaloran los hechos", dice el tribunal, que les absolvió también del delito de falsedad.
La pena mínima impuesta a tres mossos, unida a la plena absolución para el cuarto agente (un cabo) fue interpretada como una gran victoria por parte de los sindicatos policiales, molestos con la gestión que Interior hizo del asunto de Les Corts.
El abogado del detenido, Raúl Huertas, explicó ayer que también presentará un recurso de casación con argumentos similares a los expuestos por la fiscalía.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 23 de junio de 2009