A Telecinco los realities le funcionan, así que a ellos se encomienda. Tras Gran Hermano -que ya está preparando su undécima edición-, Supervivientes -que acaba de cumplir ocho años en antena-, o la actual edición de Operación Triunfo -que ayer abandonó Ramoncín, recién incorporado al jurado-, ahora la cadena prueba suerte con un nuevo formato: El topo.
Se trata de una adaptación del viejo (tratándose de un concurso de telerrealidad) programa belga The Mole, que ya adaptaron en su momento TV3 y ETB-2 (2003) así como Cuatro (en 2006) y que todas titularon El traidor.
El concurso, una coproducción de Telecinco y Four Luck Banana, es una suerte de híbrido entre Gran Hermano y Supervivientes. Los 15 concursantes (de entre 23 y 41 años) convivirán y deberán superar diversas pruebas en esta ocasión en Australia, donde se rueda el programa. El punto diferenciador de El topo es que uno de los concursantes no es más que un infiltrado cuya finalidad es boicotear al resto de los concursantes sin que éstos lo desenmascaren (y cuya identidad sólo conocen "una o dos personas", según aseguró ayer Leonardo Baltanás, director de producción de contenidos de la cadena de Mediaset, durante la presentación del programa).
Si el equipo supera una prueba, suma puntos. Si fracasa, los suma el topo. El premio final, 120.000 euros, se repartirá entre finalista e infiltrado dependiendo de los éxitos o fracasos de los concursantes.
Daniel Domenjó, desde Madrid, y Emilio Pineda, desde Australia, presentan el concurso, que trufará la programación de Telecinco. Los jueves habrá gala en directo en prime time (a partir de hoy, 22.30) y diariamente se emitirán resúmenes tras el informativo (15.30).
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 25 de junio de 2009