Antes de la final se rindió homenaje al que fuera futbolista camerunés Mar-Vivien Foé, fallecido de forma súbita durante un partido de la Copa Confederaciones de Francia 2003. En la foto, su hijo posa junto a los jugadores y el trío arbitral con una camiseta con el número de su padre, el 17.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 29 de junio de 2009