La mayoría de empresas de telecomunicaciones, entidades bancarias, compañías de seguros, etcétera, utilizan la llamada bien al móvil bien al fijo como "No identificada". ¿Medidas de seguridad? ¿Para quién?
Personalmente estoy harto de mensajes spam, llamadas publicitarias y, lo peor, llamadas anónimas cuyo fin exclusivo es incordiar al receptor. Solución: no atender a ninguna llamada anónima. Pero si es un contacto de una mutua, hospital... ¿cómo sé quién es auténticamente un impostor o una empresa? ¿No podría algún ministerio prohibir las llamadas anónimas?
Éste es un juego de muy mal gusto, producto de una tecnología que en lugar de ayudar al consumidor, lo veja. ¿Qué podemos hacer.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 30 de junio de 2009