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Crítica:TEATRO

Atasco a las tres

Atención a este programa cómico en sesión doble de Mr. Kubik, compañía madrileña que hace diana con cada disparo. El gran atasco, espectáculo con el que abre fuego, hubiera encandilado a Cortázar, a Luis Alcoriza y a Luigi Comencini, autores de otras fábulas sobre lo que puede suceder en una autovía en un embotellamiento colosal. Fernando Sánchez-Cabezudo, director de Mr. Kubik, lleva el tema más allá. El atasco en el que se ven embutidos Maya, autoestopista de largo recorrido, y Gallardo, oficinista sin horizontes que la recoge, es metafísico y definitivo: en él intiman, se casan, tienen hijos y envejecen. Su historia de amor en un vetusto automóvil Trabant de la extinta Alemania comunista es una parábola tan ingeniosa como divertida sobre la acomodación a la adversidad por instinto de supervivencia.

EL GRAN ATASCO Y METRO CÚBICO

Dos espectáculos de Mr. Kubik. Intérpretes: F. Sánchez-Cabezudo y Ana Cerdeiriña. Madrid. Sala Cuarta Pared. Hasta el 26 de julio.

Metro cúbico, segunda parte del programa, habla de la especulación inmobiliaria a través de un personaje mudo con el empaque de Buster Keaton. Sin exagerar.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 16 de julio de 2009