La portavoz de Aralar, Aintzane Ezenarro, equiparó ayer lo "hiriente" que para algunas personas pueda resultar las víctimas del terrorismo la exhibición en lugares públicos de fotografías de presos por terrorismo con lo que para otras pueda resultar "la presencia de militares en el Parlamento vasco". Ezenarro realizó esa afirmación tras presentar una petición de comparecencia del consejero de Interior, Rodolfo Ares, para que explique "qué base legal" tiene la retirada por la Ertzaintza de fotografías de etarras que pueden verse habitualmente en las calles, establecimientos públicos y, en estas fechas especialmente, recintos festivos de muchas localidades vascas.
Ezenarro se refería implícitamente con su comparación al encuentro protocolario que mantuvieron la presidenta de la Cámara, Arantza Quiroga, con el delegado de Defensa en el País Vasco, coronel Miguel García Domaica, fechas después de que éste acudiera al acto de homenaje del Parlamento autonómico al último asesinado por ETA.
La primera retirada de una foto de un preso de la banda terrorista tuvo lugar precisamente con ocasión de la concentración de repudio al asesinato de Eduardo Puelles, en Arrigorriaga, en la que participaban su madre y sus hermanos. El ertzaina que, subido a una escalera y sin pasamontañas que le ocultara el rostro, descolgó la imagen de la fachada de un edificio en la plaza consistorial de la localidad, donde estaba colocada, fue aplaudido por los asistentes.
Interior ha realizado en las últimas semanas múltiples intervenciones para retirar fotografías de presos de ETA. El artículo 4. b de la ley de Víctimas insta a los poderes públicos a "evitar la realización de actos efectuados en público que entrañen descrédito, menosprecio o humillación de las víctimas o de sus familiares, exaltación del terrorismo, homenaje o concesión pública de distinciones a los terroristas, y actuarán de manera especial contra las pintadas y carteles de tal índole". Aralar resaltó ayer que en la ley no se dice nada expresamente acerca de la exhibición de fotografías, por lo que defiende que éstas pueden mostrarse libremente.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 17 de julio de 2009