El Kurdistán iraquí celebró ayer, sin incidentes, elecciones presidenciales y parlamentarias. Unos 2,5 millones de votantes estaban convocados a las urnas. Los analistas consideran probable la reelección del actual dirigente autónomo, Masud Barazani (en la foto). El vencedor tendrá como principal cometido la negociación de un nuevo estatus político para la ciudad de Kirkuk, rodeada de importantes yacimientos petrolíferos y disputada por el Kurdistán y el Gobierno central.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 26 de julio de 2009