El PP ha celebrado el primer aniversario de la "sede" de la Diputación en Vigo con una profusión de estadísticas como foguetes (15.000 visitantes atendidos, cientos de miles de euros ahorrados en viajes a Pontevedra...), sin precisar en cambio cuántos funcionarios atienden esas oficinas y así desmentir la acusación socialista de que no los hay porque, de hecho, esa sede funciona como una agencia electoral del PP.
Desde ese baluarte y sin ánimo exhaustivo, Rafael Louzán y su vicepresidente, José Manuel Figueroa, expiden promesas, como a la directiva de la asociación de excavadoras, que lloran su crisis; despiden a miss Pontevedra, haciendo votos por su éxito en Cancún, donde compitió para Miss España; presentan fiestas gastronómicas y veraneos o, en fin, reparten directamente cuartos: a la federación vecinal (30.000 euros), que Caballero quiso condenar al ostracismo desde que se plantó frente a la vivienda protegida que introdujo en el plan general de urbanismo; a la Delegación de Árbitros de Fútbol de Vigo (9.000), a la Asociación de Ayuda a la Vida (5.000) o, la última, a la Asociación Gallega de Jugadores de Azar (3.000, para combatir las ludopatías).
Frente a ese despliegue, Caballero deja que la maqueta del plan Moneo dormite sin agitar mayores debates y responde a las preguntas filtradas de los vecinos en un programa exclusivo de Televigo que, para más escarnio, se confunde con el Aló presidente de Chaves, pero sin la pimienta de su histrionismo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 27 de julio de 2009